Las autoridades sanitarias de Portugal han ordenado el fin de la publicidad destinada a menores de 16 años de galletas, cereales, yogures y batidos de chocolate.
La medida pretende desincentivar el consumo de azúcares, grasas saturadas y productos con alto contenido en sal entre los más pequeños y será efectiva a partir de octubre.
Para ello, se retirarán todos los anuncios en pantallas, redes sociales, radio y televisión de galletas y batidos de chocolate, el 90% de los de cereales de desayuno y el 72% de los de yogures.
En un comunicado, la Dirección General de Salud (DGS) explica que el consumo de estos productos, con alto contenido de sal, con grasas saturadas y azúcares añadidos, está asociado al desarrollo de enfermedades crónicas, en especial obesidad, enfermedades cardiovasculares y oncológicas.
La DGS ha realizado un análisis nutricional de casi 2.500 productos antes de concluir que sólo podrá haber publicidad del "17% de los refigerantes, el 28% de los yogures, el 21% de los quesos y el 10% de los cereales de desayuno.
Las autoridades portuguesas alegan que para elaborar esta lista de productos cuya publicidad no podrá ir dirigida a menores de 16 se han basado en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, que "prohíbe toda la publicidad dirigida a niños de chocolates, tartas, zumos, refrigerantes y helados".