La gota de aire frío consigue meter toda la masa de aire que nos deja viento, oleaje y nevadas importantes. Por otro lado, todo ese sector tan denso de nubosidad deja lluvias muy importantes en Baleares, que ya han caído más de 70 litros por metro cuadrado. Una segunda banda de lluvia está impactando con mucha fuerza en la región de Murcia, en Alicante y al sur del Golfo de Valencia.

En la imagen de precipitación del radar se puede ver núcleos rojos y amarillos cómo están descargando con mucha fuerza en el este de la Península. Además el viento está rolando algo al nordeste y por tanto ayuda a que entren las lluvias a la costa de manera más importante. Ojo también a la mitad norte porque siguen entrado las lluvias y esa masa de aire frío.

¿Qué es una ola de frío?

La definición que nos da AEMET como ola de frío significa que al menos durante tres días en las estaciones que se tomen como punto de referencia las temperaturas mínimas tienen que estar por debajo del percentil del 5%. Y, ¿esto qué significa?

Esos son unos valores que a lo largo de nuestra historia se han registrado durante esas entradas de aire frío en las estaciones valores muy bajos de temperatura que han dejado unos límites a partir de los cuales en ciertas zonas si baja la temperatura entonces se podría considerar que ya es ola de frío.

En zonas de litoral, Baleares, Ceuta y Melilla si la temperatura baja de 0º durante tres días si que sería ola de frío. Del litoral a 200 metros de altura tendría que mantenerse la temperatura al menos tres días entre los 0º y los -5º bajo cero. De los 200 metros a los 800 debería estar entre -5º y -10º y en zonas de más de 800 metros tendría que estar a menos de -10º.

Funciona por umbrales porque no es lo mismo que haya 0º en Valencia, Denia, Murcia o Málaga a que haya 0º en Navacerrada o en el interior de Castilla y León donde es algo mucho más habitual. Por tanto se cogen esos datos históricos y según las zonas se valora si están por debajo de esos umbrales de temperatura mínima al menos durante tres días.