Los dolores de garganta y musculares son habituales cuando abusamos del aire acondicionado en nuestros hogares u oficinas y establecemos la temperatura a menos de 25 grados. El frío tiende a generar contracturas en los músculos del cuello, la espalda y la zona lumbar. Además, también puede ocasionar problemas respiratorios al deshidratar nuestras mucosas, algo que aumenta las posibilidades de enfermar de laringitis o bronquitis y baja nuestras defensas.

Pero nuestros bolsillos también sufren y eso es algo que hemos podido comprobar, sobre todo este año. Si usamos el aire acondicionado a 20 grados, se calcula que se puede llegar a pagar hasta un 40% más a la hora que si nos mantenemos en los 25.

Por todo ello, los expertos en eficiencia energética aconsejan utilizar métodos de refrigeración pasiva siempre que sea posible, como bajar las persianas, abrir las ventanas por la noche y tener bien aislado nuestro hogar. El aire acondicionado solo se debe usar cuando no quede más remedio.