El conductor pudo ver cómo un buitre negro descendía gran velocidad en dirección a la ventanilla del conductor, que en esos momentos permanecía abierta. El animal terminaría impactando contra la ventana trasera de vehículo.

Los policías detuvieron el vehículo y decidieron hidratar al animal, que se encontraba aturdido y en estado de fatiga. Finalmente decidieron llevárselo con ellos y liberarlo en el pico Pones, un punto elevado del Puerto de Tíscar.