Un agente de la Guardia Urbana de Barcelona ha matado a un perro corpulento y de razas cruzadas al que disparó mientras éste le mordía el brazo. Según informaron fuentes policiales, el propietario del perro fue detenido porque, al ver lo sucedido, agredió al agente de policía.

Los hechos ocurrieron en la plaza de Espanya de Barcelona, cuando una patrulla de la Guardia Urbana quiso identificar a una persona sin hogar. La patrulla vio a la perra deambulando sola, sin atar y sin bozal y, ante la apariencia de que se trataba de un perro de raza peligrosa, pidió al propietario del can que lo atara, como establece la ordenanza de tenencia de animales.

El animal le mordió en el brazo, el agente le pidió que atara al animal, y según afirman fuentes policiales, en vez de seguir sus instrucciones, animó a la perra a seguir con su ataque. Ante esta situación, el perro hizo ademán de saltar al cuello del policía, que optó por disparar. Tras comprobar que el disparo mató al animal, el dueño del perro agredió al policía, a quien golpeó con un patinete en la cabeza, por lo que fue detenido.

PACMA, que ha convocado una concentración de protesta en la Plaza Sant Jaume "para evitar que este caso quede impune", había exigido a la Guardia Urbana de Barcelona, "la ciudad presuntamente 'amiga de los animales", que abriera una investigación para llegar al final de la cuestión.

"Son necesarias explicaciones urgentes que determinen los motivos de este procedimiento extremo que ha acabado con la vida de una perra que, según una multitud de testigos, en ningún caso había actuado de forma agresiva", han manifestado los responsables de PACMA, que además han iniciado la movilización por las redes sociales a través del hashtag #JusticiaParaSota.

Por su parte, el agente sufrió una contusión en la frente y una ruptura dental debido a la agresión. Como fija el protocolo de la Urbana en los casos en los que un agente utiliza su arma reglamentaria, la Unidad de Deontología y Asuntos Internos (UDAI) de la policía local barcelonesa ha iniciado una revisión de los hechos que ha concluido que el agente actuó en defensa de su integridad física y que no le quedó otra opción que disparar al animal.