La Policía Nacional investiga la muerte de un hombre que trabajaba como portero de un edificio en el distrito madrileño de San Blas-Canillejas y cuyo cuerpo ha sido hallado en casa de uno de sus vecinos, quien se encuentra en paradero desconocido. Según ha podido saber laSexta, la víctima, Esteban, tenía 66 años.
Las cámaras de seguridad grabaron al portero accediendo a una vivienda en el bloque donde trabajaba. Es lo último que supo su familia. La Policía ha conseguido una orden judicial para entrar en el piso y ha encontrado el cuerpo del hombre apuñalado.Ahora buscan al vecino que vivía allí.
Esteban desapareció el martes por la tarde, tras darle la merienda a su nieto. Bajó al portal y se quedó en la portería, donde llevaba trabajando desde hacía 30 años. Sus vecinos y familiares ya no volvieron a verlo. Recorrieron el barrio y los hospitales antes de poner la denuncia.
Su propio hijo comprobó el miércoles, gracias a las cámaras de seguridad, que el conserje no había salido del edificio. Su cuerpo sin vida fue hallado esta madrugada en el número 366 de la calle Alcalá de Madrid, en el barrio de Pueblo Nuevo.
Después de que los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid abriesen la puerta del domicilio, los agentes de la Policía encontraron el cuerpo sin vida del hombre con heridas de arma blanca, según ha confirmado a laSexta la Policía.
El dueño de la vivienda no fue localizado en el lugar, por lo que está siendo buscado por los agentes como potencial sospechoso del crimen.
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¿Qué podemos esperar? Aunque no se puede descartar ninguna hipótesis, la causa más probable que manejan los agentes es que el hombre y la mujer, de 47 y de 51 años, hayan puerto por inhalar monóxido de carbono.