El policía que recibió la llamada de la joven de 15 años secuestrada en Carabanchel ha explicado a laSexta que la menor aseguró a los agentes que su captor quería "descuartizarla y tirarla a un contenedor". Eso fue, al menos, lo que le aseguró el agresor a la víctima.

Los hechos ocurrieron el pasado miércoles, cuando la Policía recibió una llamada de un número encriptado de una menor que aseguraba estar secuestrada en un local. Los agentes tardaron en dar con su ubicación, ya que la joven no supo indicar el lugar exacto, sino las características del mismo.

Según ha explicado el agente que la atendió, la menor se había marchado de forma voluntaria con el hombre cuando le expresó que tenía algo que enseñarla y sus amigos lo habían visto, por lo que fue cuando el secuestrador salió a decirles que la joven se había ido para que no sospecharan cuando ella pudo llamar a la Policía.

Primero fue atada a una silla y aprovechó que el agresor había subido a la planta de arriba para zafarse de la silla y buscar algo que le sirviera de ayuda. En un cajón halló un teléfono móvil apagado. "No tenía tarjeta SIM, pero al encenderlo le ponía que podía llamar a los servicios de emergencia y fue lo que hizo". Además, encontró un cuchillo que se guardó en la ingle para defenderse, pero el agresor se lo interceptó.

Al llegar, la escena era dantesca: "Nos encontramos a la niña tumbada en el suelo con un cable que la rodeaba entera, de los pies a la cabeza, boca incluida, y encima de esos cables cinta americana. Estaba puesta tipo sirena, con las manos entre las rodillas y atada completamente, sin poder moverse".

"Tenia la mordaza tan fuerte queno podía cerrar los ojos. Nosotros pensamos cuando la vimos que la niña tenía algún problema en la cara, pero no, era de la mordaza", ha expresado el agente.

La menor estaba "muy asustada, gritando", aunque el fuerte volumen de la música la acallaba. "Él estaba de espaldas a nosotros, encima de la niña. Nosotros vimos que había en el suelo una sierra, un cuchillo... todo al lado del agresor. Él estaba envolviéndola con cinta americana, lo primero que hicimos fue tirarnos encima de él y apartarlo de la niña de los cuchillos y de la sierra", ha narrado.

Según ha expuesto el policía: "La intención que tenía era la que decía la niña, seguramente, que era descuartizarla y tirarla a un contenedor. Eso es lo que le informó a la niña que le iba a hacer".

Prisión provisional para el agresor

El magistrado del Juzgado de Instrucción número 4 de Madrid ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza para el agresor, que será investigado por un delito de secuestro.