Nueva polémica urbanística en Madrid por la tala de más de un millar de árboles en el entorno de Madrid Río y Comillas. Allí, el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso tiene previsto cortar un total de 1.027 ejemplares por la ampliación de la Línea 11 de Metro, unos planes que se han topado con el rechazo frontal de la oposición y la indignación de los vecinos de la zona.

El Ejecutivo regional, no obstante, asegura que compensará al Ayuntamiento de la capital, también en manos del PP, con 19.513 árboles. Una reposición que, según la Administración, se ha calculado en función de la legislación autonómica. Según fuentes de la Comunidad de Madrid citadas por Europa Press, se preservarán 58 árboles de la zona afectada protegiéndolos con tablones y se trasplantarán otros 348.

Sin embargo, desde Más Madrid rechazan frontalmente esta tala en el entorno de uno de los 'pulmones verdes' de la capital, que el portavoz de campaña para las elecciones municipales, Eduardo Rubiño, tachaba este lunes de "nuevo destrozo a las zonas verdes de Madrid sustituyendo árboles por cemento". "Parece que el Ayuntamiento de Madrid está en una guerra abierta contra los árboles y contra las zonas verdes", aseveraba el aún diputado en la Asamblea.

También la candidata al Consistorio, Rita Maestre, ha criticado que la medida es fruto del "capricho de ubicar la salida del metro en el corazón de un parque en pleno Madrid Río". "Donde menos se va a usar y tras una modificación sin la preceptiva información pública", ha denunciado. Desde la formación ya han avanzado que, si Maestre gana las elecciones el próximo mes de mayo, darán "la vuelta" al proyecto y reubicarán la estación de Metro enclavada en el Paseo de Yeserías en una zona más alejada, como estaba proyectado originalmente en 2019.

Rechazo de los vecinos

En cualquier caso, la idea tampoco gusta a los vecinos de la zona, que ya han mostrado su rechazo a la propuesta con carteles en los que, junto con su nombre y edad, defienden cada uno de los árboles en peligro en Madrid Río, así como con cartelería a lo largo del parque con una imagen con decenas de puntos rojos, uno por cada árbol a talar, y una cadena humana. "Esos árboles son nuestros", ha reivindicado Susana de la Higuera, portavoz de la Asociación de Vecinos Pasillo Verde Imperial.

Por su parte, José Jiménez, presidente de la Asociación de Vecinos de Comillas ha asegurado que la tala de los árboles "es un desastre totalmente": "El quitarlos todos para que luego nos pongan unos palotes es vergonzoso", ha aseverado.

Almeida promete que "no se perderá un solo árbol"

Por su parte, el actual alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, prometía este lunes que "no se perderá un solo árbol" en Madrid Río, argumentando que aquellos que sean talados se reemplazarán. "No se va a perder uno solo. Una ley establece que el árbol que se tale ha de ser reemplazado por una serie de árboles", señaló ante la prensa, defendiendo que la nueva infraestructura "va a beneficiar" y "supondrá que se talen árboles que serán reemplazados".

Por el momento, las obras de ampliación de la citada línea del suburbano ya han arrancado en el entorno de Yeserías, ya con vallado. El primer tramo de la ampliación contará con 18,3 kilómetros, cruzará bajo el río Manzanares y conectará Plaza Elíptica con Conde de Casal creando dos nuevas estaciones, una dentro del Parque de Comillas y otra en el entorno del Puente de Praga. Unos trabajos en los que el Ejecutivo autonómico prevé invertir 500 millones de euros, con un plazo de ejecución de tres años y medio.