En una entrevista concedida al El Español, Antonio Sánchez, el hombre que hizo el agujero donde murió el pequeño Julen, ha asegurado que está tranquilo y que no le preocupa lo que pueda declarar el dueño de la finca, David Serran: "Ellos hablan porque están nerviosos".

Según Sánchez, el tío de Julen le encargó perforar dos pozos, uno de 111 metros, donde cayó el pequeño el pasado 13 de enero, y un segundo de 150. Además asegura que tapó ambos con piedras.

"No estaba la zanja que el dueño abrió luego. Ni el suelo estaba rebajado. Yo sé cómo dejé aquello. Después de mí, alguien trabajó allí", añade.

Además, asegura desconocer que el dueño de la finca no posea licencia ya que a él, pese a que le diese mala espina, le dijo que tenía los permisos necesarios para llevar a cabo la perforación.

Por su parte, David Serrano sigue insistiendo en que el pocero nunca terminó de sellar el agujero y que fue él quien tuvo que usar bloques de hormigón para taponar la boca.

Estos eran los bloques que el dueño de la finca puso sobre el pozo donde cayó Julen: "El niño debió escurrirse"

El abogado de David Serrano, dueño de la finca de Totalán donde estaba el pozo por el que cayó Julen ha enseñado los mismos bloques de hormigón que colocaron sobre el pozo tras la obra. "El niño debió escurrirse por los dos bloques", ha señalado Antonio Flores.

El dueño de la finca de Totalán se rompe: "Mi niña jugaba con Julen y podría haber sido ella. No me lo voy a perdonar nunca"

El dueño de la finca de Totalán en la que murió el pequeño Julen cuando cayó por un pozo de más de 100 metros de profundidad ha asegurado que nunca se va a perdonar el terrible suceso: "El niño estaba jugando cuando escuché voces aterradoras, me acerqué y había ocurrido que el niño se había escurrido entre los dos bloques y había desaparecido".