Si el objetivo de este anuncio de Fotocasa era atraer todas las miradas, lo ha conseguido. Un piso de tres habitaciones en Guindalera (Madrid) en buenas condiciones, con ascensor y amueblado por 990 euros entra dentro de lo habitual en la capital de España. Un precio que se puede considerar elevado, pero que está dentro de la horquilla de los alquileres de los pisos de esas características en la zona.

El propietario se debió de plantear cómo podría él llamar la atención para que su piso atrajera a los interesados en el alquiler. Seguro que, después de hora de razonamiento lógico y de buscar ideas en Internet, se le ocurrió la curiosa estrategia de ocultar algo que no sabemos muy bien que puede ser debajo de una manta en el sofá.

Lo que también oculta el anuncio es la veracidad de esas tres habitaciones, ya que, teniendo en cuenta los 60 metros cuadrados que dice poseer y las imágenes del anuncio, cuesta mucho creerse que en esa vivienda exista más de una habitación. En las imágenes solo se ve un espacio con cama; quizás también a otro del tamaño de una pequeña alacena sea considerado en el anuncio también como un dormitorio, aunque cuesta imaginarse a alguien durmiendo allí.

Intriga en las redes

Las redes no han tardado en percatarse del misterioso bulto del sofá. En la cuenta de Twitter del @elzulista pregunta en un tuit: "Cucuuuuuú... ¿hay alguien ahí?". Este comentario es el detonante de la salida de multitud de respuestas jocosas.

Entre los tuiteros hay quienes se imaginan a un casero intentando echar al anterior inquilino de forma poco sutil y otros, un poco más subiditos de tono, especulan con las posturas sexuales que pueden estar haciendo dos o tres personas debajo de la manta.

Se armó el belén

Otro detalle que no ha pasado desapercibido es que está montado el belén en una de las mesas del salón. La mayoría de los usuarios comentan en todo burlón que esperan que esté incluido en el precio. Lo que está claro es que las imágenes de este piso copado de objetos dan para un buen entretenimiento, pero menos gracia le hará al que lo tenga que ordenar.