La Fiscalía pide penas de hasta 13 años de cárcel para cuatro presuntos miembros de un clan de origen serbio acusado de haber intentado comprarle un riñón a un indigente, a cambio de 6.000 euros, para facilitar el trasplante que uno de ellos necesitaba.

En la sección séptima de la Audiencia de Barcelona se ha iniciado el juicio contra los cuatro acusados, que afrontan penas de entre 9 y 13 años por delitos de promoción de trasplante ilegal y coacciones, así como una falta de lesiones, dado que supuestamente pegaron al indigente cuando en el último momento desistió de venderles su riñón.

Los procesados forman parte de un clan familiar de origen serbio que fue investigado por la Audiencia Nacional por supuesto tráfico de seres humanos, en una causa que fue archivada en enero de 2014 pero que permitió destapar el presunto intento de compra del riñón, gracias a las conversaciones telefónicas intervenidas por la Policía Nacional.

La Fiscalía acusa a los procesados, tres de ellos miembros de una misma familia y un cuarto que trabajaba con ellos como chófer y traductor, de haber intentado comprar por 6.000 euros el riñón a un inmigrante "sin papeles" de origen marroquí que vivía en la indigencia en L'Hospitalet de l'Infant, en Tarragona.

Según el ministerio público, el clan trató de comprar el riñón para uno de los acusados, Toni R., al que en octubre de 2014 se diagnosticó una hipertensión arterial maligna renal por la que tuvo que iniciar un tratamiento de hemodiálisis en un centro sanitario de Reus.