“Hasta ahora siempre he intentado mantenerme fuerte pero siento que me derrumbo a gran velocidad”, es uno de los mensajes que contienen las últimas cartas que han recibido de su madre. También su última foto en la cárcel de Bangkok en la que lleva seis años presa.
“Dice mi madre que allí cada dos por tres están matando con bolígrafos porque no hay otra arma, hay ratas y serpientes”, explica Mónica Soler, hija de Nieves, española presa en Tailandia.
Nieves llegó allí tras ser detenida en el aeropuerto con tres kilos de metanfetamina ocultos en su maleta.Para este delito en Tailandia, la pena es de muerte, pero tras admitir los hechos, se la rebajaron a cadena perpetua. “Dos meses antes mi hermano falleció por un accidente laboral y entonces mi madre se descolocó”, explica Mónica.
Ahora una petición en Change.org pide al Rey Felipe VI y al Ministerio de Asuntos Exteriores que interceda para que Nieves sea uno de los presos que el rey de Tailandia indulta cada 12 de agosto con motivo del cumpleaños de la reina.
No sería el primer indulto tailandés a un español, en 1994 la catalana Yolanda Ming lo consiguió tras cinco años en la misma prisión tailandesa a la que llegó por transportar dos kilos y medio de heroína. “Me llamó la directora y yo pensaba que era para darme la bronca por alguna cosa que había hecho mal y era para darme la noticia de que había sido concedido el perdón”, explicó Ming en agosto de 1994.