"Los perros están bien". Es la esperanzadora frase que ha aparecido en un cartel que cuelga del estanque en el que hasta hace unos días estaban varios perros que esperaban ser rescatados. En el vídeo sobre estas líneas se puede ver el anuncio del rescate, en el que además se manda fuerza a La Palma.
Ayer, Aerocámaras, la empresa de drones que se había desplazado desde Pontevedra para proceder al rescate de estos canes rodeados por la lava del volcán de La Palma, desvelaba que los vuelos de reconocimiento de la zona no daban con los animales. "Por lo menos han tenido humor", ha respondido Jaime Pereira, el consejero delegado de Aerocámaras, ya se confesaba extrañada de no encontrar a los perros, ni con cámaras térmicas, ni citándolos con reclamos que deberían atraerlos.
Un misterio que dejaba a miles de personas con el alma en vilo. Y es que ante la devastación que ha provocado la erupción del volcán de Cumbre Vieja, eran muchos los que buscaban alivio con este rescate animal.
Ahora parece que el misterio ha llegado a su fin. Los perros no están, pero un 'Equipo A', como reza el cartel anónimo, les habría rescatado.
Desde Aerocámaras, la empresa de drones que llevaba días gestionando los permisos para poder iniciar el rescate, avisaban hoy de que seguirán sobrevolando la zona para confirmar que no se trata de un bulo y que los perros están a salvo. En uno de esos vuelos explican que han encontrado huellas "que aparentan ser de personas dentro de la zona de exclusión. Esto podría explicar la ausencia de los #perros en la zona inspeccionada". "Las imágenes de sus drones acreditan que ahí está. Y lleva al menos dos días en el estanque, solo que el viento la había tirado y vuelto del revés, por eso nadie había reparado en el "Equipo A", ha explicado Pereira.
Pereira no sabe cuándo ocurrió, pero sospecha que hace al menos dos días. Y, además, no le extraña: las imágenes térmicas muestran que hay puntos de la costra de la colada a 40-60 grados, sobre los que podría caminar alguien relativamente informado o ayudado con una cámara térmica de mano, aunque todo ello parezca una temeridad.
"Lo importante es que los perros han salido de ahí. Es lo que queríamos. Ahora solo queremos verlos... y nos vamos", ha añadido. Lo que sí tienen claro los veterinarios que asesoran a esta empresa y a la plataforma animalista "Leales.org" es que los podencos no han salido solos de esa isla entre la lava.
Podrían haberlo hecho, porque si ha caminado una persona, podrían cruzar también ellos, que pesan menos, poco más de quince kilos. Sin embargo, no le ven sentido: en ese lugar los animales tenían agua y recibían comida regularmente. No se hubieran ido.
El Pevolca "ha hecho todo lo que tenía que hacer"
El Pevolca ha hecho "todo lo que tenía que hacer" en relación con los perros cercados por la lava en La Palma, esto es mantenerlos con vida al procurarles alimento y bebida y autorizar su rescate por dron, y a partir de ahí "ya no sabemos nada más", ha afirmado el director técnico, Miguel Ángel Morcuende.
El directivo del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico de Canarias ha explicado este jueves en rueda de prensa que tiene que decir "claramente" que se ha hecho en todo momento aquello que es su obligación desde el momento en que se tuvo conocimiento de la existencia de estos podencos.
Por ello la primera decisión fue la de tratar de alimentarlos y se envió agua y comida, con lo que los perros recuperaron la fortaleza física, y posteriormente se pidió al Pevolca que evaluase la posibilidad de efectuar su rescate por tierra.
Esta petición se consultó con el comité científico del Pevolca y este indicó que no era posible porque entrañaba grave riesgo para las personas, por lo que se desechó esta posibilidad, ha continuado Morcuende.
Posteriormente, hace tres días, se presentó el plan de la empresa de drones de intentar el rescate por vía aérea, lo que aprobó el comité de dirección del Pevolca y así lo comunicó personalmente Morcuende.
Para ello se hicieron pruebas del rescate anteayer y a continuación, ha indicado el director técnico del Pevolca, "ya no sé absolutamente nada más".