El perro de una víctima del coronavirus en Wuhan ha estado esperando a su dueño en la puerta de un hospital durante tres meses.

Los sanitarios del Hospital de Taiking, en Wuhan, fueron los que observaron cómo, día a día, el animal esperaba en la puerta del centro hasta que la dueña de una pequeña tienda de ultramarinos del interior del centro se enteró de su historia.

La trabajadora le apodó 'Xiaobao', "pequeño tesoro", por la lealtad que ha demostrado a su dueño, que falleció tan solo cinco días después de ingresar en el centro médico.

Según las declaraciones de Wu Cuifen al diario 'The New York Post', la lealtad del animal, de siete años, le cautivó. Por eso decidió acogerle en su tienda.

Pero la presencia de Xiaobao en el centro médico no era de agrado para todos los pacientes, que llegaron a recriminar la estancia del animal en la tienda de ultramarinos. En este marco, los trabajadores del centro se pusieron en contacto con la Asociación de Protección de Animales de Wuhan, que se están haciendo cargo del animal a la espera de que encuentre un nuevo dueño.