En Hontanares de Eresma, en Segovia, lo que no faltan son niños. Hay 1.601 habitantes, según datos del INE, y medio millar son menores. Trescientos de ellos de menos de nueve años. De hecho, es la población de España con la media de edad más baja: 34,6 años, concretamente.

No obstante, lo que sí falta es un colegio en condiciones y un pediatra, tal y como llevan años denunciando los vecinos.

"Un pueblo sin colegio es un pueblo sin vida, y los niños lo que traen es vida. Los profesores cuando vienen al colegio, bajan al bar, compran el pan... Los abuelos vienen a recoger a los niños...", detalla Ana Arévalo, presidenta de la Asociación de Vecinos Fontanares Unidos, que lucha por más servicios en Hontanares.

Dulce, de nueve años, le ha escrito a los Reyes Magos una singular carta para que traigan un pediatra al pueblo para ella y sus amigos. Esta niña va a un colegio fuera del pueblo porque el único que hay allí es un centro cultural que adaptan como centro de primaria.

Jessica Martínez, educadora del pueblo, considera que no es el lugar ideal. "Hay que tener en cuenta que en un centro cultural no existen las aulas especializadas que hay en el resto de colegios, o las pistas deportivas... Un colegio en un pueblo siempre es importante porque los niños se mueven mucho por sus amiguitos del pueblo y si tienen un colegio al final esos lazos se hacen fuertes...", detalla.

Pero el alcalde de esta localidad, Javier García, ha perdido la esperanza en llegar a tener el colegio, ya que hace poco que levantaron uno en el municipio de la lado. "La posibilidad de un instituto, ahora que muchos de nuestros niños son más mayores, tendría sentido", dice.

Por otro lado, el pediatra no se le ponen porque la población de Hontanares no llega a la ratio que demanda la Junta de Castilla y León, que son 3.000 habitantes.