Los convocados emulaban al movimiento de los 'chalecos amarillos', que protestan contra la subida del combustible en Francia. 500 manifestantes, sin autorización y sin una reivindicación concreta salvo sus críticas al Gobierno, se han echado a las calles de Bruselas.
Han usado la fuerza bruta hasta que han conseguido tumbar un coche policial, luego han propinado patadas, los golpes, y finalmente han prendido fuego a otro vehículo.
Se han convocado a través de las redes sociales y se han acercado hasta la oficina del primer ministro para pedir su dimisión.
Ni las pelotas de goma, ni los chorros de agua han frenado a los manifestantes, que se han enfrentado a los agentes con todo tipo de objetos y utilizando los adoquines a modo de proyectil. Una violenta protesta que ha terminado con más de 70 personas detenidas.
El último adiós
Familiares, amigos, políticos y empresarios se despiden de Isak Andic en Barcelona
Entre los asistentes... El president de la Generalitat, Salvador Illa, y el ministro de Industria, Jordi Hereu, son algunas de las personalidades que se han acercado hasta el tanatorio barcelonés de Les Cortes para dar el último adiós a Isak Andic, fundador de Mango.