Dougie Hamilton estaba pasando unas vacaciones con su novia en Toronto, Canadá, en un apartamento que alquilaron a través de Airbnb. Acababan de llegar a su dormitorio, cuando Dougie empezó a sentirse incómodo. "Llevabamos solo 20 minutos en el apartamento cuando me vi el reloj. Tuvimos un día muy largo en la ciudad, lo único que queríamos era llegar al apartamento y relajarnos", cuenta.

Todos alguna vez nos hemos "sentido observados", y en este caso Dougie estaba en lo cierto. Descubrieron que, en un reloj despertador, había escondida una cámara espía, informa 'Daily Record'. "Estaba conectado a un cable como el de los cargadores móviles, lo que no parecía lógico. Lo más extraño de todo esto es que hacía poco que había visto un vídeo en Facebook sobre cámaras y cÓmo podían estar ocultas incluso en los relojes", cuenta.

La cámara estaba situada de manera que se pudiese ver todo lo que ocurría en el apartamento, concretamente, enfocaba a la cama. Tras encontrar la cámara, llamaron a la Policía de Toronto, que sigue investigando sobre lo ocurrido.

Por su parte, escribieron una queja a Airbnb, que rápidamente les dijo que se marcharan a uno de los hoteles de lujo más cercanos, a coste de la plataforma. Además cancelaron las próximas reservas del propietario del apartamento.