El Papa ha aceptado la renuncia del obispo ultra de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla, y ha nombrado administración apostólico de esta diócesis al hasta ahora obispo auxiliar de Madrid, Jesús Vidal, según ha informado la Conferencia Episcopal Española (CEE) tras la comunicación de la Nunciatura apostólica.

El obispo ha estado rodeado de polémica desde su nombramiento ya que, entre otras cosas, ha estado vinculado a iniciativas contra la homosexualidad, terapias de reconversión, ha presidido misas por Franco y fue premiado en 2012 por Hazte Oír por su "defensa de la dignidad humana".

Reig Pla, de 75 años, fue nombrado obispo de Alcalá de Henares el 7 de marzo de 2009 y tomó posesión de la diócesis el 25 de abril de ese año. Nació el 7 de julio de 1947 en Cocentaina (Alicante), diócesis de Valencia. Este mismo año presentó su renuncia como obispo de Alcalá por motivos de edad, la cual ha sido rápidamente aceptada por el papa Francisco.

Algo extraño, y es que el pontífice suele tardar años, en concreto cinco, en aceptar una renuncia, mientras que esta vez lo ha hecho en dos meses. Además, otro detalle que sorprende es que no ha nombrado un sucesor, solo un administrador temporal.

El elegido para este puesto ha sido cardenal Carlos Osoro pone ahora al frente de la diócesis de Alcalá a uno de sus fieles, indica Religión Digital, ya que es uno de los tres obispos auxiliares de la Archidiócesis de Madrid y, en concreto, con 48 años, el más joven de España.

Jesús Bastante, periodista de 'Religión Digital' ha desvelado a que, aunque probablemente el hecho de no haber nombrado un sucesor se deba a que es difícil encontrarlo, también cree que hay algo más. "No se aguantaba más. Es una defenestración en toda regla de un obispo polémico", ha reconocido.

Aunque son muchas las polémicas en las que se ha visto envuelto, parece que lo que podría haber provocado su cese son las terapias para curar la homosexualidad en el obispado de Alcalá de Henares que él patrocinó.