Continúan saliendo a la luz informaciones sobre la investigación del bebé que fue arrojado, presuntamente, por su padre al río Besòs en el municipio barcelonés de Sant Adrià.

Según ha podido saber laSexta, los padres del recién nacido reservaron una habitación en un hostal para, presuntamente, que la joven diera a luz este lunes.

Este establecimiento está situado en la ciudad de Barcelona al lado de un McDonald's y, precisamente, un testigo explicó que vio a varias personas sacar bolsas de este restaurante de comida rápida del río.

Dos días después del nacimiento del pequeño, este miércoles, el padre fue detenido por Mossos d'Esquadra tras confesar que arrojó al bebé al agua, alegando que no era un hijo deseado.

Desde entonces, el detenido se encuentra bajo la tutela de la Fiscalía de Menores porque tiene 16 años. Respecto a la madre, todavía no se ha hecho pública mucha información. Si bien, fuentes cercanas a la investigación han confirmado que tiene 15 años y que ocultó el embarazo a su familia.

Salieron del hostal con el niño vivo

El propietario del hostal ha explicado en declaraciones a laSexta que la pareja llamó el lunes para reservar una habitación y llegaron hacia las 16:00 horas. Algo que le sorprendió, ha dicho, es que los jóvenes llegaran sin el bebé, "ella estaba muy embarazada", y salieran un día después con el niño. Al preguntar al padre por el bebé, este le dijo que tenía "unas semanas".

A pesar de que todo apunta a que la menor dio a luz en el hostal, el dueño ha asegurado que en la habitación "no había nada de sangre" y que "solo se escucharon unos lloros durante unos minutos". Al día siguiente, el martes hacia las 11:00 horas, los jóvenes abandonaron "tranquilos" el hostal "con bolsas de McDonald's". En cuanto a la edad de los menores, el dueño del hostal ha dicho que "ella tiene 17 años y él, 16".

Continúa el dispositivo de búsqueda

Mossos d'Esquadra, bomberos y agentes de la unidad subacuática y de subsuelo continúan trabajando en las labores de búsqueda del pequeño. Las unidades a cargo de la investigación creen que el bebé podría haber acabado en el mar, por lo que la búsqueda se centra en los 800 metros que van desde la zona del río en la que fue arrojado hasta su desembocadura.

Para facilitar las tareas, un helicóptero participa en el operativo y los agentes que gestionan el dispositivo han rebajado el nivel del cauce del río y algunas zonas ya no llegan a los 40 centímetros de profundidad.

Los servicios de emergencia comenzaron a buscar al bebé este martes por la tarde, después de recibir la llamada de un hombre que alertaba de que un joven había entrado en el río con un bebé en brazos y momentos después, había salido del agua sin él.