La historia de quienes somos se puede contar a través de nuestros peinados. Viendo los diferentes cortes de pelo podemos saber, más o menos, de qué época se trata una imagen. Los peinados de los 50, las menas de los 60 y eso si no hablamos de tribus urbanas. Cada una con su estilo definido: los hippies, los punks, los siniestros...
En este sentido, hay quien ha hecho de su peinado, como Raffaella Carra o Elvis, su marca de la casa. Las peluquerías de todo el mundo se llenaron de mujeres queriéndose parecer Meg Ryan o Jennifer Aniston en la serie 'Friends'.
En el momento que vivimos, el rasgo más común en los peinados es la falta de uniformidad: "A partir del 2000, la moda en peluquería es muy indefinida, lo que valora la gente es que personalices el trabajo", explica Mikel Luzea, director y fundador de los International Hairdressing Awards.
Hoy se reúnen en Madrid, en la cuarta edición de estos premios, algunos de los mejores peluqueros del mundo. Que nos recuerdan como los futbolistas nos ayudan a los hombres a prestarle más atención a su pelo.
"Hoy ya no hay cosas de hombre ni de mujeres, nada tiene género, estamos unidos y ya no puedes decir más 'hombres y mujeres'", asegura Cos Sakkas, director artístico internacional de Toni&Guy.