La primera manifestación del Orgullo LGTBI en España se celebró sin autorización en 1977 en Barcelona. "Sentía mucho miedo, pero intentaba disimular", explica el hombre que grabó las primeras imágenes que existen de esa movilización.

Y pese a que la imagen que se difundió parecía festiva, lo que ocurría era diferente, porque la manifestación acabó con los grises corriendo detrás de los manifestantes por Las Ramblas. Personas homosexuales, trans, feministas, comunistas y prostitutas estaban unidas por una reivindicación.

El mensaje de esa primera manifestación caló, y un año después se produjo la primera manifestación legal. Uno de sus organizadores nos cuenta que en esta ocasión fue diferente, porque fue una movilización "divertidísima en la que había una enorme diversidad".

Aún se mantenía la Ley franquista de Peligrosidad Social por la que una persona podía ir hasta cinco años a la cárcel por ser homosexual, pero los manifestantes lo tenían claro: "Éramos conscientes de que estábamos escribiendo la historia".

Y por eso, aunque el miedo aún perduraba, "lo importante era que nos vieran", explica uno de los organizadores. Una historia apasionante que se escribía a un ritmo frenético y con dos sentimientos: el miedo y la ilusión. "En aquellos años lograron meternos un represor dentro del cuerpo: con el miedo, con la vergüenza social. Pero lo importante era que se hiciera, que nos vieran. Lo importante era dar la cara".