El Open Arms, buque de la organización humanitaria Proactiva Open Arms, cumple tres meses de bloqueo en el Puerto de Barcelona desde que la Capitanía Marítima de Barcelona denegó el retorno de la embarcación a las aguas frente a Libia para continuar con su tarea de rescate de inmigrantes.

La semana pasada el director de la ONG badalonesa, Óscar Camps, explicó en declaraciones a la emisora RAC1 que se estaban planteando "cambiar de bandera" al barco de la asociación, lo que le permitiría operar sin las "complicaciones" que encuentra en España.

Entonces también manifestó la preocupación por un hipotético cambio en la Moncloa en las elecciones generales, ya que "si un Gobierno que tendría que ser afín nos hace esto, no puedo imaginarme si entrara un Gobierno diferente".

Desde su fundación en 2015, la organización asegura haber salvado a 59.706 inmigrantes que iban a la deriva en barcazas y balsas en el Mediterráneo. Esta es la segunda vez que el Open Arms está retenido, después de que el año pasado lo retuvieran durante un mes en Italia tras ser acusado de favorecer la inmigración irregular.

Capitanía Marítima, dependiente del Ministerio de Fomento, asegura que ha bloqueado la salida del buque a incumplimientos de convenios internacionales, como no haber desembarcado a inmigrantes en los puertos más cercanos, aunque esos asuntos no dependen del Open Arms, sino del rechazo de países como Italia y Malta a permitir su entrada.