Cindy levanta todas las mañanas a su hermano. Jordi ejerce de fisioterapeuta y la más pequeña se encarga de las medicinas. "Dándole las medicinas, la comida, la 'fisio', que es indispensable para él porque así puede respirar", explica Cindy Linares, hermana de Jomián.
Jomián tiene 13 años, parálisis cerebral y le falta un pulmón. La Junta de Castilla-La Mancha le ha reconido el grado de gran dependencia, pero sin embargo le obligan a acogerse al servicio de prevención de la situación de dependencia, es decir, su familia tiene que adelantar el dinero y presentar todas las facturas para conseguir cobrar los 387 euros de ayuda.
"Todos los meses pendiente de las facturas y cuando voy a la farmacia, qué hago, le pido las facturas...", explica Julissa Ramírez Salazar, madre de Jomián. Hace 10 días Julissa ha tenido que dejar a Jomián al cuidado de sus hermanos, ha conseguido un trabajo temporal a 200 kilómetros pero aún así no le llega para adelantar los gastos de su hijo.
Una situación, que según denuncia, a la Junta le da igual. "Dicen si le has podido criar 13 años con tu espalda, ¿por qué no puedes seguir criándole con tu espalda?", afirma Julissa.
La Plataforma en defensa de la ley de Dependencia ya ha denunciado el caso. "Parece que se está intentando que la madre se canse de pedir facturas para que al final salga gratis el cuidado de ese hijo", asevera José Luis Gómez-Ocaña, miembro de la plataforma.
Pero la Junta asegura que el objetivo es que la prestación se dedique en exclusiva al dependiente. La oposición le pide que rectifique. Ni Jomián ni sus hermanos están dispuestos a rendirse y aseguran, lo seguirán haciendo.