El fuego rodea literalmente As Neves. Cualquier ayuda es poca para luchar contra la voracidad de las llamas. En cuestión de minutos el fuego ha invadido el municipio pontevedrés.
Los 4.000 habitantes de esta localidad han tenido que salir de sus casas con lo puesto. Miran con angustia, impotencia e incertidumbre hacia sus hogares. "Nunca vi nada igual, es impresionante", afirma uno de los vecinos.
La UME se ha incorporado a las tareas de extinción de unos fuegos claramente intencionados. La sequía y las altas temperaturas tampoco ayudan a controlar la situación.
La situación al sur de Galicia es crítica. En Vincios, Pontevedra, han tenido que salir corriendo para no acabar siendo pasto de las llamas.
En una gasolinera la urgencia por escapar del fuego es absoluta. Y de camino a Baiona nadie acierta a explicar a una niña el por qué de esta situación. En la ciudad, las llamas han llegado literalmente a las casas. Lo mejor es acercarse a la playa.
Estos devastadores incendios que están asolando Galicia han terminado con la vida de dos personas que se encontraban en el interior de una furgoneta en Nigrán. Por el momento, se desconocen las identidades de las víctimas.
La periodista Noelia Otero, desde el pleno centro de Vigo, destaca la peligrosa situación que están viviendo sus habitantes tras la llegada del fuego al centro de la ciudad gallega: "Nunca he sentido este miedo, no hay precedentes. La gente se está volviendo loca".
Por su parte, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, explica la "horrible noche" que están sufriendo en la ciudad por la llegada de las llamas de los incendios: "Tenemos tres hoteles y un pabellón para acoger a la gente. Recomendamos cerrar las ventanas y abandonar las zonas rurales".