Operación Arkan
Nueve detenidos que robaban coches en Madrid, los desguazaban en Guadalajara y vendían las piezas en Marruecos
Los detalles Los cabecillas del grupo son hermanos y viejos conocidos de las autoridades, pues llevaban "operando en España desde 2015".

Resumen IA supervisado
Una banda dedicada al robo de coches en Madrid y Guadalajara ha sido desarticulada, resultando en nueve detenciones. Los delincuentes desguazaban los vehículos robados, vendiendo sus piezas en el mercado negro de Marruecos. Antes de desmontarlos, se aseguraban de que no tuvieran dispositivos de geolocalización. La operación policial, denominada Arkan, ha permitido incautar un desguace valorado en más de un millón de euros. Los cabecillas, dos hermanos con antecedentes, operaban desde 2015. Utilizaban coches lanzadera para evitar controles policiales y robaban principalmente en el aeropuerto de Madrid. La investigación comenzó tras la denuncia de un propietario.
* Resumen supervisado por periodistas.
Robaban coches, los desguazaban y después vendían sus piezas en el mercado negro de Marruecos. Operaban en Madrid y Guadalajara donde nunca llegaron a vender un coche entero. Eso sí, antes de despiezarlos se aseguraban de que no tenían dispositivos de geolocalización. Por estos hechos, hay un total de nueve detenidos.
Volantes o amortiguadores, peo también motores y faros. Componentes que se observaban en las imágenes sobre estas líneas y que son de los más demandados en el mercado negro. En definitiva, toda una especie de desguace incautado en la Operación Arkan que supera el millón de euros.
No obstante, "estos vehículos y sus piezas son gama media, de entre 20 y 30 .000 euros" cuya salida en el mercado negro es "muy fácil", explica el inspector central de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (UDYCO), Víctor Pardilla.
El aeropuerto de Madrid era su territorio de acción, pues allí robaban los coches de trabajadores y vecinos que luego despiezaban y mandaban a territorio marroquí. Fue la denuncia de uno de los dueños hace un mes que ha desembocado en la entrada de una nave en Guadalajara a mazazos y por sorpresa.
En las imágenes se observa al conductor, pero con él cayeron otros ocho. Los cabecillas son hermanos y viejos conocidos de las autoridades, pues llevaban "operando en España desde 2015", según confirma Pardilla.
Todos eran expertos en robo de coches, que antes de despiezarlos los aparcaban una semana, es decir, los dejaban "'enfriando' para comprobar que no tenían dispositivos de geolocalización", explica el inspector. Entonces, trataban de no dejar rastro en la venta ni por internet ni por encargo siendo ellos mismos quienes los llevaban a su destino.
De hecho, "para detectar controles policiales iban con coches lanzaderas pegados al camión". Pero una vez más la Policía los ha cazado y tendrán que responder por los 50 coches robados y despiezados.