Un policía disparó a una niña con una pistola táser por la espalda. Ella sólo tiene 11 años y el policía la obliga después a entrar dentro de la tienda, donde le extraen la púa que ha quedado clavada en su espalda.

Es entonces cuando el agente le recrimina el robo con un comentario racista: "¿Sabes, cariño, esta es la razón por la que no hay estas tiendas en la comunidad negra?".

El comentario lo hace un agente que también es negro y tiene 55 años. Ahora se investiga su dudosa actuación policial porque incumplió varios puntos del código de conducta. El primero fue el comentario en sí, el segundo que no encendió la cámara hasta después de disparar.

Además, no advirtió a la niña de que iba a hacerlo y el incidente no es lo suficientemente grave como para justificar el disparo. Tendría que ser un caso de peligro grave para usar la pistola contra un niño, y por todo ello al policía se le han limitado sus funciones.