La madre ha sido la encargada de contar en el juicio el estremecedor relato de su hija. Al parecer, desde los cuatro años, fue violada por su hermanastro de 12 años, que ahora tiene 14. Para evitar que contara lo sucedido, la sobornaba con gominolas.

La niña, según palabras de la madre, sufre pesadillas constantemente y se despierta llorando. Atraviesa episodios de ansiedad cada vez que su madre se aleja. La madre ha contado en el juicio que su pequeña le contó lo que estaba viviendo a través de una muñeca.

La jueza Teresa Szagun aseguró que la declaración de la madre fue "desgarradora" y reconoce que el niño "debe pagar por sus actos". Ha sido puesto en libertad bajo fianza hasta que se dicte sentencia el próximo mes, según 'Metro'.