Un niño con autismo de 12 años está en coma tras haber ingerido una bebida, presuntamente con lejía, que le otorgó un grupo de jóvenes. Los hechos han ocurrido en Reino Unido.

El menor salió junto a su hermano, de 11 años, el viernes por la noche a escondidas de su madre. Según la versión de la progenitora, al parecer, ambos se encontraron con un grupo de jóvenes que le otorgaron una lata de bebida. Una vez lo ingirió, se fueron corriendo.

La policía encontró a los menores por la mañana, después de que una mujer alertara a los equipos de emergencia al encontrar al joven junto a su hermano pequeño en estado de shock.

El menor fue ingresado en el Hospital St George's, en Londres, donde tuvieron que inducirle en coma en la Unidad de Cuidados Intensivos. Sin embargo, desde entonces su estado ha mejorado considerablemente, y se espera que sea dado de alta con brevedad.

La abuela del pequeño ha lanzado una recaudación de fondos para que la sociedad británica pueda mostrar al menor su apoyo. Según ha afirmado, "no puede entender por qué a nadie le gusta, y por qué le hacen esto quienes pensaba que eran sus amigos": "Quiero mostrarle que a la gente le importa", ha afirmado en el mensaje de la petición.