A pesar de que la pequeña Lilas creyó que su madre se encontraba durmiendo, en realidad la mujer estaba muerta. Fueron los vecinos quienes dieron la voz de alarma a la Policía al ver a la niña desatendida en el balcón, según recoge Le Parisien.
"Era extraño que la niña durmiera en el balcón, pero cuando le preguntaba ella respondía que su madre estaba durmiendo, lo cual era posible porque la joven vive principalmente de noche. Ella me acabó diciendo que su madre dormía en el baño, así que fuimos a la Policía", ha declarado una vecina para este medio.
Antes de que fuera la Policía, debido a que el agua en el edificio estaba cortada debido a una avería, la niña dijo que no tenía agua y que su perro tenía sed.
Esperando a que los agentes llegaran, los vecinos lograron convencer a la niña para que les abriera la puerta. Cuando ella finalmente accedió, un fuerte olor les golpeó de lleno y comprobaron que la casa estaba totalmente desordenada y que había latas de cerveza y pastillas esparcidas por el suelo.
Una vecina se hizo cargo de la niña. "La cogí en mis brazos, la llevé a mi casa y la duché porque no se había lavado durante días".
Cuando la Policía llegó al lugar, abrió la puerta del baño y encontró a la madre de Lilas fallecida. Según Le Parisien, la mujer llevaba muerta, al menos, seis días.
Durante este tiempo, la niña abrió una caja de raviolis y comió algunos e hizo sus necesidades en una olla.
La niña fue hospitalizada para que le realizaran un análisis y poder comprobar su estado de salud. Por el momento, la investigación sigue abierta para esclarecer las causas de la muerte de la mujer.