El cuerpo de Nerea, una niña granadina de 11 años, no produce plaquetas ni glóbulos rojos o blancos. La pequeña sufre aplasia medular, una enfermedad que consiste en la desaparición de las células encargadas de producir sangre en la médula osea.

Según ha informado el diario 'ABC', hace unos meses la menor comenzó a mostrar moratones por todo el cuerpo y, tras varias pruebas, los médicos le diagnosticaron esta afección.

Para poder sobrevivir, Nerea necesita urgentemente un donante de médula compatible, ya que ni sus padres ni su familia cercana lo son. Hasta que lo consiga, la niña tiene que someterse a transfusiones de sangre cada cuatro o cinco días.

Sin embargo, encontrar a una persona cuya médula sea compatible con la del paciente receptor es mucho más complicado que encontrar a alguien con un tipo sanguíneo compatible.

Por ello, la familia de Nerea ha iniciado la campaña 'Todos con Nerea'. Desde la página de Facebook de la iniciativa explican que convertirse en donante de médula es sencillo: solo hay que acercarse al Banco de Sangre junto a la Plaza de Toros de Granada o a "cualquiera de los pueblos que recorre el vehículo del Centro Regional de Transfusión Sanguínea de Granada y Almería".

Así, tras rellenar un formulario y donar un poco de sangre, se pasa al registro de donantes, donde se puede comprobar si hay compatibilidad con algún paciente con qué paciente puede ser compatible

Sus familiares han insistido en que esta campaña no es solo por Nerea, sino por todos los niños y personas adultas que necesitan una donación de médula para salvar su vida.

Su madre ha explicado al diario 'Ideal' que la necesidad de su hija "puede ser la de otra persona en el futuro y la donación no es dolorosa; es como una transfusión de sangre y una punción en la cadera, se tardan apenas unas horas y aunque después el donante puede sentir alguna molestia, no es peligroso para la salud y la única secuela es que habrás salvado una vida".