Laura y María, hermanas, son parte del 49% de mujeres rurales que viven en España. Están al mando de unos campos de tabaco al este de Extremadura. "Mis padres son agricultores y decidimos dedicarnos a llevar un relevo generacional en nuestro sector, afirma María. Por su parte, Laura defiende que le echan "agallas", que sacan "fuerza" y pueden "hacer cualquier tipo de trabajo igual que los hombres".
Esta familia es el claro ejemplo de que el campo también es de ellas, aunque lo cierto es que pese a que hay cinco millones de mujeres que trabajan en el medio rural, tan solo el 25% de las explotaciones agrícolas están dirigidas por ellas, una cifra todavía alejada de esa igualdad buscada en el campo.
En este sentido, Teresa López, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales, afirma que "los territorios rurales están masculinizados". "El problema de buena parte de nuestro entorno rural es que cuando desaparece el estado del bienestar y no llegan los servicios, se asume que los tenemos que prestar las mujeres", critica López.
Laura afirma al respecto que "aunque los comienzos siempre son difíciles", lo son todavía más cuando eres mujeres, ya que, según ha señalado, "te ponen unas pequeñas trabas". Sin embargo, aunque el despertador suene cada día a las 6:00 horas o llegue a casa llena de barro, esta mujer rural dice que es "súper gratificante el saber que estás a la altura de cualquier otra persona, que puedes hacerlo y sentirte orgullosa".
Además, hoy en día lo rural no solo pasa por la tierra, sino que también entra en el laboratorio, ya que "todo cultivo necesita análisis", tal y como señala Alba Berrocoso, responsable de un laboratorio químico. Y es que en ellos también hay mujeres al mando. Entre probetas y tubos de ensayo, Alba se encarga de realizar "el análisis de azúcares y alcaloides" en una sala.
Las mujeres que emprenden proyectos culturales o empresariales también necesitan ayuda, aunque a veces se sienten solas a la hora de sacarlos adelante: "Muchas veces te sientes muy sola y no sabes ni a dónde acudir, ni el papeleo a solventar, o quien te puede echar una mano con el plan de empresa o de marketing", manifiesta Teresa López, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales.
Todas ellas defienden una misma cosa: "No hay que olvidar que existimos, que estamos, y que sabemos hacerlo". Y es que si se siembra igualdad, el mundo rural recogerá prosperidad.
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