Malati Chougule fue víctima de una negligencia médica que casi le cuesta la vida en la India. La mujer, de 55 años, despertó en su propio funeral tras ser declarada erróneamente muerta por los médicos del hospital al que sus familiares la trasladaron tras perder el conocimiento después sufrir una fiebre muy alta.

Según informa The Hindu, los médicos intentaron reanimarla, pero al no conseguir ningún tipo de reacción por parte de la paciente declararon su fallecimiento.

Ante lo ocurrido, la familia pagó los servicios médicos y se llevaron el cuerpo de la víctima a su pueblo natal, donde celebrarían su funeral.

El cuerpo de Chougule fue tendido frente a su domicilio para que familiares, vecinos y seres queridos pudieran despedirse de ella. Lo que no sabían es que esta ocasión no sería el último adiós, ya que Chougule abrió los ojos y dejó a todos los presentes impactados ante lo sucedido.

La familia está pensando en tomar medidas legales contra el hospital donde Chougule fue atendida, aunque desde el hospital niegan las acusaciones.