Una mujer de Lowa, Estados Unidos, se ha declarado culpable de haber atropellado de forma intencionada a una menor de 14 años por el simple hecho de ser mexicana.

El brutal ataque racista ocurrió en 2019, cuando Nicole Poole Franklin atropelló a una adolescente por su nacionalidad. A pesar de que la menor quedó herida, la mujer se dio a la fuga, y fue detenida poco después en una estación de servicio de Conoco, donde también había increpado a los trabajadores con insultos racistas.

No fue el único incidente racista en el que se vio involucrada la acusada ese mismo día. Poole Franklin también atropelló con un Jeep Grand Cherokee la pierna de un niño negro de 12 años que caminaba por la acera de la localidad de Des Moines, según pudo comprobar la Policía. Los testigos afirmaron entonces que la acusada aceleró antes de atropellar al menor, que sufrió heridas leves.

La menor tuvo que estar ingresada durante varios días al presentar heridas graves. Sin embargo, nada llevó a la acusada a arrepentirse, e incluso llegó a afirmar a los agentes que lo había hecho porque era mexicana. Ahora, la mujer se ha reafirmado.

En el juicio, ha reconocido que atropelló a la joven porque era mexicana, y se ha declarado culpable de los delitos de odio de los que se le acusa. Los fiscales del caso piden para ella 27 años de prisión.