Veronica Theriault, una mujer de 46 años de Australia, ha sido condenada a 25 meses de prisión por gestión deshonesta de documentos, abuso de cargos públicos y haber engañado en su currículum para obtener un puesto público, tal y como ha informado 'ABC Australia'.
Todo parecía ir como había planeado la mujer. Consiguió el puesto de directora de Información dentro de una institución que brinda apoyo al servicio público y al jefe del Gobierno del estado australiano de Victoria. Sin embargo, al poco tiempo de haber sido contratada, la Administración detectó un gran deterioro de la salud mental de la mujer que tan solo llevaba un mes en la empresa.
Por ello, la 'Comisión Independiente contra la Corrupción Bruce Lander' comenzó a hacer un seguimiento para averiguar cómo había sido contratada y hallaron la verdad: había falsificado su currículum, además de presentar una carta supuestamente escrita por un médico, que en realidad había sido redactada por ella. Incluso, llegó a poner una foto de la modelo Kate Upton en su perfil de Linkedin.
Falseó una nómina para pedir más dinero
En cuanto a la negociación de su contrato, falseó una nómina para exigir más dinero, ya que su supuesto sueldo en el sector privado era más elevado que el que le ofrecían en el sector público: 167.000 euros al año.
La mujer se ha declarado culpable de todos los cargos y el juez le ha condenado a 25 meses de cárcel con un periodo sin libertad condicional durante 12 meses por los delitos cometidos de engaño, gestión deshonesta de documentos y abuso de cargos públicos.
"Esto es una ofensa grave. Usted obtuvo empleo de manera fraudulenta por el cual le pagaron un sueldo alto y en el transcurso de este tiempo pudo haber tenido acceso a información confidencial", declaró el juez del caso, Michael Boylan. Además, afirmó que se trata de un "delito sofisticado" que requiere de cierta planificación.
Por su parte, el abogado de la acusada aseguró que la mujer se encontraba bajo los efectos del tratamiento que toma debido al trastorno bipolar que padece desde hace años. Además, defendió que el plan de Victoria Theriault "no era sofisticado y no debería haber tenido éxito", ya que la empresa debería de haberse cerciorado llamando a la empresa donde supuestamente había trabajado previamente su cliente.
Además, también se ha condenado al hermano de Veronica Theriault, Alan Corkill, por la implicación en dicho delito, beneficiándose de ello, ya que Victoria le ofreció un puesto de trabajo dentro de su gabinete y él lo aceptó a sabiendas del fraude.