Alberto Fernández, presidente de Argentina, trata de aprobar una ley que permita el aborto en el país antes de fin de año. El debate sobre el aborto mantiene al país polarizado. Ahora las leyes penalizan a las mujeres y a quienes lo practican. Esto lleva a las mujeres a abortar en la clandestinidad, pagando miles de dólares por medicamentos en la sombra y jugándose la vida. De media, mueren dos mujeres cada semana y 38.000 son hospitalizadas por abortos mal practicados al año.

Cecilia Moreau, presidenta de la Comisión de Legislación General del Congreso argentino cerró el debate previo a la votación de la ley del aborto en Argentina con una contundente afirmación: "A esta mujer que hoy está presidiendo el debate, a los 16 años le pasó; me falló el método anticonceptivo".

"Yo tomé la decisión de interrumpir ese embarazo. Y también me pasó situaciones de compañeras que no tuvieron la posibilidad que tuve yo de acceder de acceder a un aborto más seguro", manifestó Moreau. Estos declaraciones resumen la problemática en el país. Salvo riesgo para la vida o violación, abortar en Argentina es ilegal, aunque siguen ocurriendo. Se habla de unos 500.000 abortos al año, pero ese dato ni siquiera es fiable.

En este sentido, Mariela Belski, directora Ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina señala: "Desde el año 2000 no tenemos una cifra estimada de abortos clandestinos porque es muy difícil acceder a esta información".

La ley permitiría abortar en las 14 primeras semanas de embarazo

El Gobierno propone ahora una ley de plazos: se podría abortar dentro de las 14 primeras semanas de embarazo. Se trata de un problema de salud pública en el país. "Además, es una cuestión de justicia social y de igualdad, para que todas podamos acceder de la misma forma a las decisiones que queramos tomar", defiende Martina Ferreto, integrante de la Campaña Nacional por el Aborto.

Miles de mujeres marchan para pedir la legalización del aborto

Miles de mujeres como ella, pañuelo verde en mano, se han movilizado estos días. Confían en que la norma se apruebe en el Parlamento, aunque lo complejo llegará en el Senado, donde ya naufragó el proyecto en 2018. Que se llegue a aprobar sería solo el primer paso, porque luego habría que implementarlo.

Todavía en los casos permitidos por ley, hoy en día abortar es una carrera de obstáculos. "Hay desinformación sobre la legalidad y existe un tabú sobre el tema", manifiesta Martina Ferreto, mientras que Mariela Belski destaca que "por la objeción de conciencia, hay hospitales en los que no hay ni un solo médico dispuesto a hacer abortos". Esta ley garantizaría al menos un doctor que haga abortos en cada centro hospitalario.

De aprobarse la ley, Argentina sería pionera en una de las regiones que más penaliza el aborto. Solo Uruguay, las dos Guayanas, Puerto Rico, Cuba y Ciudad de México permiten el aborto sin condiciones dentro de las primeras semanas.