Un carnicero ha muerto este lunes por la noche tras ser corneado en los corrales de la plaza de toros de Murcia cuando participaba en el apuntillado de un astado, que poco antes había sido devuelto por cojo en la primera de las corridas de la feria.

Aunque el trabajador fue trasladado con urgencia a un hospital cercano y los médicos lograron recuperarle de una parada cardiorrespiratoria, finalmente falleció como consecuencia de las graves heridas sufridas.

La mortal cogida se produjo cuando los empleados de los corrales y de la empresa compradora de la carne de las reses procedían a rematar al toro, de nombre Limpiador, para llevarlo al desolladero.

Según testigos citados por la agencia Efe, en uno de los pasillos superiores de los corrales se procedió rematar con la garrocha al animal, que cayó al suelo aparentemente muerto, pero cuando entró el carnicero para rematarlo con la puntilla, el toro se levantó y le embistió, asestándole varias cornadas.

El fallecido sufrió una cornada en el vientre que le produjo una evisceración de los intestinos y que desembocó en un shock hipovolémico que no pudo superar.