El caso de Vlada Dzyuba ha conmocionado a la sociedad China:
la joven padecía meningitis crónica y supuestamente sólo podía trabajar tres
horas a la semana. La temperatura de la joven se disparó momentos antes de que
saliera a la pasarela, según informa el 'Siberian Times', y posteriormente se
desplomó y quedó en estado de coma.
La madre de la joven, preocupada por la cantidad de horas de
trabajo de la menor, asegura que estaba tratando de obtener una visa para volar
a China y estar con su hija antes de que falleciera: "Ella me llamaba y me
decía: 'Mamá, estoy tan cansada. Tengo tantas ganas de dormir'".
"No dormí y la llamé constantemente, rogándole que
fuera al hospital", asegura Oskana, la madre de la modelo, y es que según
asegura 'The Sun', la modelo tenía un contrato de "trabajo esclavo".
Este caso ha puesto en el punto de mira las condiciones laborales
de las modelos rusas reclutadas en China. Ahora, el defensor del pueblo del
Kremlin, Pavel Mikov, está investigando personalmente la muerte de la niña.