Un joven de 25 años ha fallecido este domingo en la localidad navarra de Bera tras sufrir graves quemaduras al explotar un dispositivo electrónico que estaba cargando en la mesilla de su habitación. Así lo ha confirmado la Guardia Civil, que investiga las causas de la explosión, cuyo origen inicialmente se ha atribuido a un teléfono móvil, extremo que posteriormente se ha descartado.

Según fuentes de la investigación en un comunicado citado por Efe, tras la inspección técnica ocular por parte de los agentes, se ha observado que la ignición ha podido deberse a un dispositivo electrónico que estaba enchufado, pero no se ha podido precisar de qué tipo por el estado en que ha quedado.

En el suelo se encontraba un teléfono móvil sin signos de explosión ni ignición, por lo que se ha descartado que el motivo de la explosión haya sido el móvil del fallecido.

Sobre las 14:20 horas, según ha detallado la Guardia Civil, los agentes han sido requeridos en un domicilio de Bera al haber explotado un dispositivo mientras un joven estaba durmiendo. La explosión ha provocado un pequeño incendio que ha afectado a la cama donde dormía, produciéndole quemaduras graves.

Los agentes le han realizado maniobras de reanimación hasta la llegada de asistencia sanitaria y posteriormente ha sido trasladado en helicóptero medicalizado al Hospital de Cruces con pronóstico muy grave, donde finalmente ha fallecido. Al lugar han acudido también Bomberos de Navarra debido al denso humo que había en la vivienda por la explosión.

Agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Navarra investigan las causas del incendio.

Con algún 'pero'

La Justicia ratifica que llamar "gilipollas" a un jefe no es motivo de despido

Así lo ha ratificado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). Eso sí, enfatiza que el insulto debe ser "concreto y aislado" en un contexto determinado, como el caso de un empleado al que le pidieron que se quedara a una reunión al terminar su turno.