Según ha informado el
comisario de la Policía Nacional en Viveiro, Jesús Seco, sobre las once de la
noche, la tormenta provocó una tromba de agua que hizo que se desbordara el
arroyo que pasa por la zona de Valdeflores, donde vivía la fallecida, Amparo
B.C..
Así, la puerta de la
última casa que está antes del monasterio de Valdeflores, en la Xunqueira, se vino
abajo por la fuerza del agua y la planta baja, donde estaba la anciana, quedó
inundada, ha explicado el responsable policial.
En la segunda planta de
la casa estaba la hija de la víctima, que se vio sorprendida y no pudo hacer
nada por salvar la vida de su madre, a cuyo cuerpo se le practicará hoy la
autopsia para determinar las causas exactas de la muerte.
En estos momentos, los
equipos de limpieza se afanan por despejar de lodo y barro las áreas afectadas
de este municipio lucense. El delegado territorial de la Xunta de Galicia en
Lugo, José Manuel Balseiro, ha explicado que para rescatar a la hija los
servicios de emergencias tuvieron que acceder a través de una claraboya, dado
que la planta baja estaba totalmente inundada.
Balseiro ha señalado, de
hecho, que los servicios de emergencias trabajaron a destajo durante toda la
noche y revisaron "casa por casa" para comprobar si había más gente
atrapada a causa de la riada, pero afortunadamente no se tiene conocimiento de
más daños personales.
Cuestión diferente son las pérdidas materiales, que ahora habrá que cuantificar después de que el agua entrara en viviendas, locales comerciales y establecimientos de hostelería. El agua llegó a arrastrar coches que estaban estacionados en la zona de Valdeflores, que ha sido la más afectada, según la misma fuente, que ha precisado que la tormenta apenas tuvo incidencia en otros lugares también de A Mariña.