Miles de luces iluminan cada brizna, paso y rama de los jardines protegidos de Torre Girona de Pedralbes, en Barcelona, tal y como puedes ver en el vídeo que ilustra estas líneas. El motivo es el espectáculo de 'Natura Encesa', que este año se llama 'Origen'. Según sus diseñadores, porque intenta reflejar el origen de los microorganismos, de la tierra, de donde nacimos. Sin embargo, también es el origen de denuncias por un posible delito contra los recursos naturales y el medio ambiente.

Las han interpuesto ecologistas y asociaciones vecinales, según explica Rosa Canals, de la Associació Veïnes i Veïns Zona Universitària. Dice que en lugar del sotobosque han colocado una alfombra de luces led, que en los 63 días que durará el espectáculo va a destrozar la biodiversidad del parque. Además, el martes se cayó un árbol, seguramente debido al estrés hídrico que viven en Cataluña, pero estaba un lugar del que precisamente se ha despejado la vegetación autóctona. Por eso, piden que la actividad se suspenda.

También los vecinos denuncian que durante el espectáculo, entre las 18:00 horas de la tarde y las 23:00 horas de la noche, les molesta la luz de los focos, la actividad de los visitantes y la música.

En Madrid, Naturaleza Encendida tiene otro espectáculo de luces con las mismas características. Se llama 'Insectos' y por primera vez lo han instalado en el parque Tierno Galván, aunque hasta el año pasado se celebraba en el Real Jardín Botánico. La principal queja vecinal allí es que se ha privatizado un espacio público.

Y es que el parque, siempre abierto, cerrará toda la Navidad entre las 17:00 de la tarde y las 06:00 de la mañana del día siguiente. Salvo, por supuesto, que hayas pagado una entrada que en un pase habitual de adulto cuesta unos 17,50 euros.

Allí hemos conocido a Joaquín, que se desplaza en silla de ruedas y ha tenido que cambiar la ruta de sus paseos porque el vallado le obliga. También a varios dueños de perros, que temen que sufran algún accidente jugando entre tanto cable. También nos trasladan una preocupación ecológica: la huida de las aves del parque, por las molestias de las luces y la música.

Esta Navidad, la naturaleza está tan encendida como los vecinos.