Según recoge la compañía en dos circulares internas dirigidas a los trabajadores de mantenimiento, el material se ha detectado en una arandela situada en bobinas de la tarjeta del módulo fuente de alimentación de las unidades 2000A, así como en una válvula de cierre de estas unidades (situada en la parte inferior del vehículo).
En el caso de la arandela, quedan suspendidos los trabajos correctivos de mantenimiento, es decir, su manipulación pero no afecta a la revisión preventiva ni a las regulaciones desde el exterior.
Respecto a la válvula de los trenes 2000A, la compañía detalla que también se suspenden los trabajos de mantenimiento que implique la apertura y manipulación interna de dicha válvula de cierre. Sí se especifica que esa suspensión de trabajos de mantenimiento no afecta al desmontaje y montaje de las válvulas de cierre, ya que se procederá a sustituir esa pieza. En consecuencia, no se requiere la apertura y manipulación de este elemento.
Recientemente se han detectado otros elementos con este material, como en la composición de una pintura aislante, sobre todo en unidades de trenes 2000 que prestan servicio en la línea 1. También ha habido otras piezas detectadas en trenes modelo 5000 de la línea 6 y 9.
Fuentes del suburbano indicaron recientemente que estos hallazgos se enmarcan en el análisis exhaustivo que realiza la compañía, en el plan de desamiantado, y que se tratan de elementos confinados, lo que evita la exposición de trabajadores y usuarios. También recalcan que ello no implica la paralización de trenes, pues se procederá a sustituirlas mediante una empresa especializada.
De momento, a través de este plan, ya se ha retirado amianto en estaciones como la de Suanzes, Canillejas, Torre Arias, el depósito de Cuatro Caminos, o el depósito de Ventas, entre otros, además de Gran Vía, Príncipe de Vergara y Pavones.
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