El mobiliario urbano es utilizado como arma en una brutal pelea a las puertas de la terraza de una cafetería de Piera, localidad de Barcelona. A puñetazo limpio, los agresores caen al suelo, enzarzados, mientras intentan separarles, pero no hay manera.

Los camareros, atónitos, no se atreven a meterse. Tan sólo recogen el mobiliario para evitar que siga la batalla campal, pero parece que eso tampoco es la solución.

Según los testigos, la disputa se produjo por una cuestión de celos. Se tiran de los pelos e incluso se arrastran a la fuerza por el suelo. Por fin, un policía interviene y se viven momentos de tensión.

Cuando parece que todo se ha calmado, aparece un hombre con un cuchillo. Los vecinos, atemorizados, intentan huir del lugar. Algunos incluso se quedan dentro de un supermercado, a la espera de que acabe la reyerta.

No hubo que lamentar ningún herido, sólo daños materiales. Cuatro personas han sido detenidas y permanecen en la Comisaría de Igualada, a la espera de pasar a disposición judicial. Se les acusa delitos de lesiones y atentado contra la autoridad.