Al menos tres mujeres y seis niños han muerto tras un ataque contra una familia de un poblado mexicano situado entre los estados de Sonora y Chihuahua, al noroeste del país, según han denunciado sus familiares.

En las imágenes obtenidas tras el ataque se puede observar una camioneta calcinada, todavía con llamas en su interior, y con múltiples agujeros de bala. "Rhonita y cuatro de mis nietos han sido quemados tras un tiroteo", denunciaba el activista Julián LeBarón.

Y en el suelo se podían ver más cuerpos."Encontré a Christina fuera del automóvil boca abajo, asesinada. Su bebé que estaba viva", declaraba este mismo activista tras la terrible escena en la que acababan de asesinar a nueve miembros de su familia. Tres mujeres y seis niños.

Viajaban desde Sonora a Chihuahua en tres camionetas. Según medios locales, un grupo armado, supuestamente vinculado con el crimen organizado, abrió fuego contra ellos y a algunos los quemó vivos. Seis pequeños heridos consiguieron escapar para pedir ayuda.

Taylor Langford, familiar de las víctimas, destaca que "este es un nivel completamente nuevo de violencia del cártel". La familia Lebarón había denunciado en los últimos meses amenazas de cárteles y presiones para dejar de usar unos pozos de agua en sus tierras.

Trump ya se ha ofrecido para librar una guerra contra los narcos, pero el presidente mexicano le ha respondido que no es una opción.