Según fuentes de la Guardia Civil en un comunicado, la chica de 15 años que denunció haber sido agredida sexualmente por cuatro menores en una población alicantina dijo tres meses después de los hechos a los responsables del instituto donde estudia que un compañero del centro le estaba amenazando con difundir un vídeo.
La agresión sexual denunciada ocurrió una tarde del mes de julio del años pasado en una zona de descampado, próxima al cementerio de Pego, en Alicante. En octubre de 2018, la víctima manifestó a responsables del centro educativo que tenía un problema con un compañero del instituto, el cual le estaba amenazando con difundir un vídeo, sin llegar a contar su contenido.
También relató que, un día del verano pasado había quedado con una amiga y con un grupo de chicos, de origen magrebí, a los que identificó plenamente por ser estudiantes del mismo instituto.
Indico que, en un momento dado, su amiga se fue y la dejó sola con los chicos, refiriendo que pasó "algo", sin llegar a especificar el qué, y que la habían grabado, al tiempo que reiteró su preocupación por la posible difusión del citado vídeo.
A finales de febrero de 2019, la orientadora del centro escolar se entrevistó nuevamente con la menor y, en esta ocasión, sí que le contó la totalidad de lo ocurrido, según el comunicado del instituto armado, que se hizo inmediatamente cargo de la investigación, mediante el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Jávea.
El Departamento de Nuevas Tecnologías de la Guardia Civil está analizando el contenido de los teléfonos móviles intervenidos los menores para comprobar la existencia de posibles grabaciones de vídeo sobre lo sucedido.
Los tres adolescentes que residen en España comparecieron ante un juzgado de menores de Alicante, que decretó su internamiento en diferentes centros de menores, así como la prohibición de aproximarse a la víctima y de contactar con ella por cualquier medio.
La investigación continúa abierta para determinar el grado de participación del cuarto menor supuestamente implicado también en los hechos. Este último es el que se encuentra viviendo desde finales del año pasado en Francia , aunque "está identificado y localizado". Sus padres han manifestado y acordado traerlo a España para que comparezca ante la Fiscalía de Menores. En caso de no venir a nuestro país, se dictaría una orden europea de detención y entrega.