El joven, que tenía 16 años cuando se produjeron los hechos, ha achacado su actuación a una "broma", según han informado los abogados tras las primera sesión de la vista oral.

La Fiscalía de Menores de Almería ha pedido ocho años de internamiento para él por un delito de incendio en concurso ideal con tres delitos de homicidio, por el que también pide cinco años de libertad vigilada.

Por estos mismos delitos, el ministerio público pide cinco años de internamiento terapéutico en régimen cerrado y otros cinco años de libertad vigilada para otro menor de 17 años.

Acusa a los otros tres menores de delitos de omisión del deber de impedir delitos por los que pide penas diferentes penas de internamiento y libertad vigilada.

El abogado Fernández Cabrera, que actúa como acusación particular en nombre de la familia de la adolescente de 15 años fallecida, sostiene que este menor no ha mostrado arrepentimiento sino "falta de empatía" y "frialdad".