Yoseline y Tasia dicen que el fuerte dolor menstrual provocado por la endometriosis que padecen, en determinados momentos, les ha llegado a imposibilitar para trabajar. "Es un dolor muy intenso, fuerte, no te lo calma ni la morfina", afirma Yoseline Bastián.
"Encima tienes que disimular porque se considera normal el dolor de regla y no puedes decirlo. Te metes en el baño, te tiras al suelo y empiezas a tener contracciones horribles", explica Tasia Aránguez
Yoseline tuvo, incluso, que abandonar su empleo, porque las bajas por este motivo estaban mal vistas: "No te creen que estés mal por un dolor de regla".
Por eso, al igual que buena parte de las agrupaciones feministas, piden que España se sume al carro de lo que debate el Parlamento italiano, tres días de baja al mes para las mujeres con fuertes dolores de regla asociados a alguna patología previamente diagnosticada.
Erija Irusta, pedagoga especializada en feminismo y menstruación, sostiene que "no puede ser que tengamos que ir a trabajar con angustia y con dolores y tampoco puede ser que nos quedemos sin trabajo. Lo que hay ahora no nos sirve".
Hay médicos que abren la puerta al debate. Francisco Carmona, jefe del servicio de Ginecología del hospital Clinic, afirma que "se asume como normal un dolor de regla invalidante que no deberíamos pensar que es normal".
También abren la puerta al debate grupos políticos. Desde el PSOE, Ángeles Álvarez, afirma que llevan a todos los Ayuntamientos "una iniciativa para que inste al Gobierno a legislar en este sentido". Desde Podemos En-Marea, Ángela Rodriguez, sostiene que su objetivo es "hacer una buena propuesta, una propuesta integral". Por su parte, Patricia Reyes, de Ciudadanos, declara que "puede ser contraproducente porque puede penalizar la contratación de mujeres".
Aun conscientes de este presunto, e injusto, peligro del que también hablan los sindicatos, afectadas por la dismenorrea consideran que el simple hecho de que la ley las tenga más en cuenta sería un gran avance.