El único hijo de una adinerada y familia de Inglaterra falleció a los 26 años sin pareja ni descendencia en un accidente de motocicleta. Los padres del joven, al quedarse sin un heredero tras su muerte, decidieron coger el esperma y congelarlo para crear lo que llamaron un 'nieto de diseño'.

El esperma fue congelado dos días después del fallecimiento y trasladado hasta California, Estados Unidos, donde el matrimonio contactó con el Doctor David Smotrich, que ya era conocido por tratar con otros casos similares.

Con esta técnica, pudieron elegir el sexo del bebé y el óvulo en el que sería fecundado. Eligieron a la mujer con la que creían que su hijo se habría casado, según su físico, intelecto y educación. Smotrich ha admitido que este caso era "muy inusual", según el 'Daily Mail'.

"La pareja inglesa perdió a su hijo en las circunstancias más trágicas. Ellos, desesperadamente, querían un heredero y un nieto. Fue un privilegio poder ayudarlos", declaraba David Smotrich, que fue pionero en 1997 en crear el primer bebé probeta para una pareja del mismo sexo.

El procedimiento pudo costar entre 60.000 y 100.000 libras, donde se incluyen los pagos a la donante de óvulos y las tarifas hospitalarias.

Actualmente el niño tiene tres años y vive con sus abuelos en Reino Unido, pero estos podrían enfrentarse a graves cargos por saltarse las leyes del país que prohíben la extracción y el uso, en este caso, del esperma sin un previo consentimiento formal por parte del fallecido.

El doctor que atendió su caso aseguró que no estaba "al tanto" de que los abuelos se saltaran las leyes británicas y que recibe a muchos británicos adinerados, como miembros de la realeza, políticos y artistócratas que buscan eludir la ley. "No estoy aquí para juzgar quién debería ser padre", ha señalado Smotrich al 'Daily Mail'.