Varios de los fallecidos han aparecido en la ciudad vinícola de Santa Rosa, pero el número probablemente aumentará en las próximas horas, según han informado fuentes del Departamento de Bomberos a la cadena estadounidense CNN, ya que solo en el condado de Sonoma se recibieron más de 240 informes de personas desaparecidas de las que solo se ha encontrado a 57 con vida.

El fuego ha devastado unas 89.700 hectáreas y destruido unas 3.500 construcciones. Aunque no se ha determinado completamente la causa de los incendios, se cree que fueron provocados por líneas eléctricas derribadas por fuertes vientos.

El gobernador de California, Jerry Brown, ha declarado el estado de emergencia para los condados de Napa, Sonoma, donde se han hallado 18 cuerpos, y Yuba debido a la amenaza que suponen los incendios para "miles de hogares".

En la región del valle de Napa más de 5.000 residentes se han visto obligados a abandonar sus hogares. "Estamos trabajando muy duro. Los efectivos han salido para reforzar principalmente las zonas del sur del estado como precaución de cara a los fuertes vientos", ha explicado el subjefe del Departamento de Protección contra Incendios de California Bret Gouvea.

Asimismo, ha informado de que al menos 8.000 bomberos se encuentran desplegados en diferentes puntos del estado en un intento por sofocar las llamas. Las autoridades también han enviado una treintena de aviones cisternas y 73 helicópteros a las áreas más afectadas.