Cuando la policía contactó con Erin Lee Macke, la madre, esta se justificó diciendo que todas las cuidadoras con las que había contactado estaban fuera de servicio y decidió dejar a los niños en casa. "Las investigaciones confirman que Macke no se había reunido con nadie para buscar supervisión adulta o cuidado a los niños mientras estaba fuera", informan fuentes policiales.

La policía obligó a la madre a que volviera y le reprobó por su conducta inaceptable. Se puede enfrentar a delitos por poner en peligro a sus hijos y por proveer de armas a menores de 21 años.

"Nunca había escuchado algo parecido a esto", asegura el policía Tyler Yompkins a 'Daily Mail'. "Hemos tenido situaciones parecidas, donde los padres se van a la casa de al lado o por la noche, pero dejar el país es totalmente distinto", prosigue.

El Departamento de Servicios Humanos de Iowa se hizo con la custodia de los niños hasta que los colocaron en casas de diferentes familiares. Los dos más pequeños están con el padre, del que la mujer se divorció en 2013.