Sopa caliente, mantas y bocadillos para los 'sintecho' en una gélida noche de invierno. "Es lo que hacemos muchas noches de invierno en la calle", cuenta Rocío, que se anima a ayudar a las personas que se encuentran en esta dramática situación.

Ella, al igual que muchos otros, no ha querido perder la oportunidad de aportar su granito de arena. "Hemos venido a traer lo que hemos podido: 40 bocadillos y una manta, aunque es poquito, pero bueno", dice una pareja que carga con una gran bolsa. "Cualquier ayuda es poca, por supuesto", apunta otra de las personas que intervienen en esta buena acción.

Algunos han echado mano de una silla y tienda de campaña: "Es emblemática, porque no entro aquí", cuenta uno de los ciudadanos que se sumó a la protesta, que asegura que "la noche será larga", en la calle y con frío.

Pero esta concentración va mucho más allá. "Es pasar la noche aquí, como hacen ellos los 365 días del año", explica Giovanna Rodríguez, de Asociación Ca la Mare.

Personas sin techo que, como cuenta uno de ellos, llevan "viviendo en la calle en Valencia desde el 2002". También hay personas con techo pero sin ropa de abrigo. "Me viene muy bien porque es para mi chiquillo", explica una señora que se acerca a recoger ropa de abrigo.

Algunos de los que recogen mantas tienen claro lo que quieren hacer en un futuro. "A ver si soy yo la que regala alguna vez la manta, en vez de que me la regalen a mi", comenta esperanzada una mujer sin hogar.

Muchos han sido los que han pasado en Valencia una noche sin techo para demostrarles que no son invisibles.